Como ya comentábamos hace unos días, el Jurado del Premio al Mejor Laboralista de esta edición 2012, organizado desde ASNALA, se reunió hace unos dias, para acordar por unanimidad conceder el Galardón a José María Antrás Badía, abogado en ejercicio desde 1960 en los Iltres. Colegios de Barcelona, Madrid, Girona y Tarragona. Desde su punto de vista, en un contexto como el actual “debería exigirse a los Abogados una especial sensibilidad social para ayudar a encauzar y aconsejar las medidas que se ven obligadas a adoptar muchas empresas por causa de la crisis, intentando orientarlas hacia la preservación del empleo, siempre que ello sea posible, mediante la aplicación de las nuevas medidas de flexibilización que permite la Reforma Laboral. “
Sobre la propia reforma laboral, su punto de vista también es muy contundente a este respecto: “l no creará empleo a corto plazo y hay que asumirlo con realismo. Lo creará a medio y largo plazo, en la medida que los instrumentos de flexibilización que ofrece la reforma se vayan asumiendo y aplicando por los agentes sociales con naturalidad y racionalidad.” A su juicio, es s preferible que toda la plantilla de una empresa cobre un 10 % menos, a que se reduzca esta plantilla en un 10 %. Y añade que “ La clave para que se genere empleo no la tiene sólo la reforma laboral, sino que es una pieza más de una política económica y financiera que permita reactivar la economía y la competitividad”
Nuestro entrevistado es natural de Barcelona donde nació un 6 de Marzo de 1937. Es Abogado en ejercicio desde 1960 en los Iltres. Colegios de Barcelona, Madrid, Girona y Tarragona.
A lo largo de su trayectoria ha sido Diputado de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Barcelona (1976 – 1.980) (Tesorero). Decano del Iltre. Colegio de Abogados de Barcelona. (1986 – 1989).
Presidente del “Consell dels Col·legis d’advocats de Catalunya” (1988). Vice-Presidente del “Consejo General de la Abogacía Española” (1986 – 1989).
Fundador y Ex-Presidente de la “Federación de Colegios de Abogados de Europa)” Antigua Conference des Grands Barreaux de la Comunauté Europeenne”.
Otro dato a tener en cuenta es que fue fundador del Tribunal Arbitral de Barcelona (1988), una de las entidades arbitrales de mayor prestigio del país en estos momentos
Además también fuefundador y Consejero de la “Caixa dels Advocats de Catalunya” (Año 1979) y Vicepresidente desde 1999. Presidente de la Mutua de los Abogados de Cataluña (1977 – 1986). Presidente de la “Federació de Mutualitats de Catalunya” 1995 – 1999.
Y ocupó el cargo de Vice-Presidente de la “Confederación Española de Mutualidades” y Responsable de Relaciones Internacionales (1995 – 1999).
¿Cómo encaja un profesional como usted ser considerado el mejor laboralista del año?
A estas alturas de mi vida profesional, solo puedo entender la distinción como el reconocimiento a una trayectoria de más de medio siglo de ejercicio profesional y a una forma de entender este ejercicio en un mundo singular y apasionante como es el del derecho laboral. Me siento honrado y agradecido a un Jurado que se ha mostrado tan benevolente con mi persona.
Hablando de abogados, ¿Qué condiciones reclaman más las empresas en un abogado laboralista?
En estos difíciles momentos, además de la preparación técnica necesaria, debería exigirse a los Abogados una especial sensibilidad social para ayudar a encauzar y aconsejar las medidas que se ven obligadas a adoptar muchas empresas por causa de la crisis, intentando orientarlas hacia la preservación del empleo, siempre que ello sea posible, mediante la aplicación de las nuevas medidas de flexibilización que permite la Reforma Laboral.
Ha cambiado mucho el papel del abogado laboralista en los últimos años?
No. Lo que ha cambiado es el escenario de los encargos profesionales. De ser partícipes creativos del crecimiento de las empresas y del empleo, hemos pasado a ser los artífices necesarios de las “restructuraciones” empresariales, pero este es el signo de los tiempos que hay que asumir esperando que vengan tiempos mejores.
¿Cómo ve la actual reforma laboral?, ¿Dónde está la clave para que genere empleo?
La reforma laboral, con sus aciertos y sus errores, era necesaria, y para constatarlo basta contemplar el enorme agujero de desempleo que se ha creado, porque la normativa precedente, a pesar de las reiteradas modificaciones que se iban implantando, no articulaba mecanismos eficaces para afrontar una restructuración de las empresas menos traumática que la que ha propiciado esta crisis.
La reforma laboral no creará empleo a corto plazo y hay que asumirlo con realismo. Lo creará a medio y largo plazo, en la medida que los instrumentos de flexibilización que ofrece la reforma se vayan asumiendo y aplicando por los agentes sociales con naturalidad y racionalidad. Es preferible que toda la plantilla de una empresa cobre un 10 % menos, a que se reduzca esta plantilla en un 10 %. La clave para que se genere empleo no la tiene sólo la reforma laboral, sino que es una pieza más de una política económica y financiera que permita reactivar la economía y la competitividad.
¿No cree que hay demasiados cambios laborales que no permiten reposar las normas y generar seguridad jurídica?
Es cierto, pero no lo es menos que con casi 6 millones de parados no hay tiempo para “reposar” normas, y lo que hay que hacer es aplicar los aspectos positivos que tiene la reforma y mejorar los negativos, aunque sea a costa de este “diluvio” legislativo. Es una situación de emergencia. Sería deseable que las próximas “reformas de la reforma” fueran consensuadas por los agentes sociales, pero como sus posiciones dogmáticas harán muy difícil un acuerdo, me atrevo a pedir al Gobierno que consulte a los que realmente vivimos el día a día de los conflictos, que somos los Abogados laboralistas (de trabajadores y de empresas). Tengan la seguridad que, desde nuestra independencia, desvelaremos alternativas y soluciones pragmáticas a muchos problemas actuales.
¿Qué está pasando con los ERES y la anulación por parte de los jueces?
Aquí sí que hay que dejar “reposar” la reforma. Ni la Judicatura puede plantear la reforma como un desafío al poder legislativo, ni éste puede culpabilizar a la Judicatura ni constreñirla a que actúe fuera del marco que le impone la Constitución.
Este “pulso” que se ha vislumbrado entre el poder legislativo y el poder judicial con la promulgación de la reforma laboral, es un error gravísimo que compromete su eficacia. Creo que ambos poderes tienen que hacer un ejercicio de responsabilidad y entender que son una pieza necesaria para reconducir la reactivación de la economía, que es lo que permitirá reducir las tasas de desempleo. Así se lo he oído ya a los nuevos presidentes del Consejo General del Poder Judicial y de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo.
¿Considera que puede tener visos de inconstitucionalidad esta reforma como dicen algunos partidos políticos?
Sí, pero en aspectos muy concretos y accesorios que no afectan al sentido global y finalidad de la reforma.
¿Sus consejos para atacar el paro juvenil y el desempleo femenino?
Las políticas para uno y otro objetivo no pueden diferir mucho de las políticas para reducir el desempleo en general, pero, obviamente con incentivos como los que se instrumentan para estos dos sectores especialmente castigados. Hay una dificultad para el fomento del empleo juvenil, que es la super-protección excesiva para los trabajadores maduros que supone lo que se conoce como la “cláusula telefónica”. Si las empresas no pueden afrontar el rejuvenecimiento de sus plantillas de una forma racional y asequible, estamos anquilosando las plantillas en estructuras antinaturales y frenando el acceso de nuevas generaciones.
En este contexto de reformas, ¿ no haría falta una política dedicada al emprendimiento y fomento del autoempleo?
Sí, pero no es lo más necesario. La realidad social del momento ya tiende a ello, sin necesidad de grandes políticas. Muchos trabajadores que han perdido su empleo y están capacitados y formados, ya intentan de modo natural la salida del “autoempleo” como autónomos, lo que puede ser el germen de pequeñas empresas.
