Diferentes voces se escucharon sobre la última alocución del presidente Gustavo Petro en la Asamblea General de Naciones Unidas
El Presidente Petro intervino como Jefe de Estado en la Asamblea General de Naciones Unidas. Esta alocución generó reacciones encontradas en el Senado de la República.
En su discurso, el Presidente Petro reiteró que los municipios cocaleros son los más abandonados por el Estado, criticó la política internacional frente al medio ambiente y se refirió a la situación en Gaza y al conflicto en Medio Oriente.
El senador del Movimiento Aico, Richard Fuelantala, respaldó parcialmente el diagnóstico del Presidente, pero advirtió que los datos no coinciden con la narrativa presidencial. Los municipios en los que se siembra coca no son los municipios más abandonados por el Estado.
Por otro lado, el Senador Fuelantala resaltó gravedad en la disminución del presupuesto asignado. “Los problemas estructurales de la Colombia profunda solo se solucionan con hechos y con gran inversión”, señaló el legislador indígena, pidiendo al Gobierno Nacional aumentar los recursos para las zonas más golpeadas por la violencia y el narcotráfico.
Desde la oposición, el senador del Centro Democrático Carlos Meisel criticó con dureza el enfoque presidencial y aseguró que “debido a ese manejo irresponsable del presidente Petro con la relación norteamericana, se va a seguir dificultando el clima bilateral que ha tenido este país con los Estados Unidos durante toda nuestra historia republicana”.
A su juicio, el mandatario no solo habló “sin pruebas” sobre supuestos operativos en el mar, sino que además “no es capaz de condenar en la ONU la tiranía de Maduro. Por el contrario, la protege y la defiende”.
Meisel también cuestionó la postura de Petro frente a la situación en Gaza, indicando que “los criminales degenerados de Hamas no justifican, bajo ningún punto de vista, la muerte de civiles y mucho menos de niños”.
En ese sentido, reprochó que el Presidente actúe como si fuera el único que se conmueve ante las tragedias humanitarias, cuando lo que el país espera es que “eleve la voz por Colombia”.
“Yo quiero saber en qué país vive Petro”, expresó, concluyendo que el mandatario parece habitar “un país que varios hemos llamado ‘Petrolandia” criticándolo severamente,
Por su parte, la senadora del Pacto Histórico Aída Avella defendió sin matices la postura de Petro y la calificó como una denuncia valiente frente a los intereses de Estados Unidos en América Latina.
Según Avella, el discurso “desenmascaró lo que quieren los Estados Unidos contra América Latina: un estado de guerra, porque están detrás de los recursos”.
La congresista aseguró que las denuncias del Presidente son acertadas, pues reflejan el cansancio de los pueblos de la región frente a hechos como los ataques a pequeños pescadores en el Caribe, “bombardeados por buques de la marina norteamericana”.