Roberto Follía Camps, notario y exdecano del Colegio Notarial de Cataluña, recibió el pasado martes el Vº Premio Puig Sallelas en un acto que reunió a más de un centenar de personas y numerosas autoridades del mundo jurídico.
La entrega del premio estuvo presidida por el consejero de Justicia, Germà Gordó, acompañado de Joan Carles Ollé, decano del Colegio y el resto de miembros de la Junta Directiva. Follía recibió el máximo galardón que otorga la institución anualmente “en reconocimiento a su ejemplar y brillante trayectoria notarial, donde ha destacado tanto en el campo del ejercicio profesional, en que ha disfrutado de una gran notoriedad, como en el de la preparación de opositores, habiéndonos legado un grupo excelente de discípulos y continuadores, así como en el ámbito corporativo de la gestión colegial, donde ha dejado una huella duradera, muy visible aún hoy en día.”
En la exposición de motivos que le han hecho merecedor del premio también se destaca “su completo y profundo conocimiento del Derecho civil catalán, que lo han consolidado como uno de los juristas más prestigiosos de Cataluña desde la transición, con una remarcable obra publicada y una muy destacada aportación a las principales instituciones jurídicas del país, de manera especial al seno del Observatorio de Derecho Privado y desde la Presidencia de la Academia de Jurisprudencia y Legislación de Cataluña.”
En el transcurso del acto Joan Egea, presidente del Consejo de Garantías Estatutarias de Cataluña, fue el encargado de realizar la glosa del premiado. En su discurso, Egea destacó “la relación de gran amistad y de maestrazgo entre Puig Salellas y Roberto Follía”, destacando los valores compartidos de “libertad, firmeza, independencia de criterio y voluntad de hacer país”. Tras repasar los más de 40 años de dedicación al notariado del premiado, Egea quiso destacar también la gran calidad humana del galardonado y el hecho de “ser un notario insigne, una persona remarcable”, así como la escrupulosidad con la que ha ejercido el derecho notarial y su gran implicación y contribución en el Derecho Civil catalán. Finalmente, concluyó su glosa afirmando que “Roberto Follía representa la esencia del notariado catalán” y asegurando que “su afabilidad, amabilidad y buen trato con todo el mundo son indisolubles del premio que se le concede”.
En su discurso, Roberto Follía aseguró que el premio “tiene un significado especial porque Josep Ma Puig Salellas fue mi padre espiritual y jurídico”. Y afirmó que “hacer de notario ha sido motivo para dar consejo y ayuda a todos los que han venido a la notaría”. Después de repasar y comentar uno por uno los motivos recogidos en la exposición de motivos que le han hecho merecedor del premio, concluyó afirmando que “hoy se cierra una trayectoria profesional y corporativa,” a pesar de asegurar que continuará publicando.
Joan Carles Ollé, decano del Colegio, destacó “la especial satisfacción de otorgar el premio a quien ha sido maestro de todos nosotros”, y repasó algunos de los principales hitos conseguidos por Follía, entre ellos, su destacada colaboración en la redacción del Código Civil de Cataluña, la reforma y ampliación de la sede colegial en su etapa como decano, su tarea como preparador de opositores, y su implicación en la Academia de Jurisprudencia y Legislación de Cataluña, en el Observatorio de Derecho Privado y en la Comisión de Codificación.
La clausura del acto fue a cargo de Germà Gordó, consejero de Justicia de la Generalitat de Cataluña, quién quiso poner de relieve que los notarios “han instrumentalizado su amor por el país a través del derecho civil” y destacó la trascendencia de la profesión que, desde un punto de vista histórico, “ha dado grandes juristas que han trabajado para dotar a Cataluña de un derecho civil propio”. En este sentido, Gordó recordó que este trabajo de siglos hará posible que en el primer trimestre de 2014 el Gobierno apruebe el libro VIº del Código civil catalán y finalice el proceso codificador. En cuanto a la figura del galardonado, el titular de Justicia destacó que “ha pasado a ser maestro de maestros” y “gente como Follía son ejemplos de país”.
Trayectoria
Roberto Follía Camps se licenció en Derecho en 1957, con premio extraordinario, y aprobó las oposiciones a notario en 1961 con el número uno de su promoción. Fue notario de Chantada (La Coruña), de Castellón de la Plana y, desde 1970, de Barcelona. Después de casi cuarenta años de ejercicio profesional, se jubiló el 29 de septiembre del 2000 al cumplir la edad reglamentaria de setenta años, y en diciembre de 2001 fue nombrado notario honorario.
Entre los cargos que ha asumido a lo largo de su trayectoria profesional y las instituciones académicas y jurídicas de las cuales ha formado o forma parte, destacar que fue ayudante de la cátedra de Derecho Civil de la Universidad de Barcelona (1958-1961) y colaborador de la misma institución académica (1971-1978); vocal de la Fundación Noguera (1978); miembro de la Academia de Jurisprudencia y Legislación de Cataluña con la medalla Pere Albert (1985), secretario (1992-2000) y finalmente presidente de esta corporación (2000-2008); miembro de la Junta Directiva de la Asociación Catalana de Arbitraje (1990-1996); integrante del primer Consejo Económico de la Universidad Pompeu Fabra, desde su creación hasta su sustitución por el Consejo Social (1990-2004); decano del Colegio Notarial de Cataluña (1990-1995); miembro del Observatorio de Derecho Privado de Cataluña (1996-2004) y de la Comisión de Codificación (1996-2008); miembro del Consejo rector del Instituto de Estudios Autonómicos (2001-2008), miembro del Consejo de Justicia de Cataluña (2002-2008), y de la Comisión Jurídica Asesora de la Generalitat de Cataluña (2003-2005). El 24 de junio de 1996 se le concedió la Cruz de San Raimon de Peñafort, y también recibió la Medalla de Oro del Cercle del Liceu.
Com es possible que aquest Sr Dn Roberto Follía Camps no tingui la Creu de Sant Jordi? O li han donat fa poc?
Atentament.