Por Francisco Fonseca Morillo. Director de la Representación de la Comisión Europea en España
El 1 de enero de 2012 Dinamarca asumió la presidencia semestral del Consejo de la UE. Será un periodo decisivo para superar la crisis financiera con las herramientas que se ha dado Europa y que ahora hay que poner en marcha.
Dinamarca forma parte del trío de presidencias que empezó con Polonia, en el segundo semestre de 2011, y continuará con Chipre, en el segundo semestre de 2012, para dar un mayor grado de coordinación y coherencia a los trabajos en marcha. Sin embargo, cada país se fija unos objetivos en función de las necesidades prioritarias.
2012 se presenta como un año de difíciles retos para la UE, según reconocen todos los líderes comunitarios. La crisis de deuda soberana acentuada el año pasado marca la actualidad.
Los objetivos de Dinamarca se resumen en los siguientes lemas: una Europa responsable, una Europa dinámica, una Europa verde, una Europa segura.
El Consejo Europeo del pasado 9 de diciembre marcó la hoja de ruta para superar la crisis y devolver la confianza de los mercados en las economías europeas. El avance del programa de la presidencia danesa reconoce que en Europa no hemos sido suficientemente rigurosos a la hora de cumplir y hacer cumplir las reglas comunes y los acuerdos adoptados en materia de reformas. Por eso es necesario hacer una llamada a la responsabilidad.
Los jefes de Estado y de gobierno de la UE, con excepción de Reino Unido, acordaron sacar adelante un Pacto fiscal para consolidar las finanzas públicas, que debe implementarse en este primer trimestre mediante la firma de un Tratado internacional paralelo pero compatibles con el dipositivo del tratado de la UE y con vocación a integrarse en el Derecho Primario de la Unión.
También se puso en marcha el acuerdo de recapitalización del sector bancario y la regulación del sector financiero, con el fin de evitar nuevas crisis. El llamado «six-pack» para reforzar la gobernanza económica en la UE con reglas de juego comunes debe aplicarse en este periodo. A la presidencia danesa corresponderá impulsar y coordinar la consecución de resultados en todos estos asuntos primordiales para la Unión Europea.
Junto al ajuste fiscal, para Europa es crucial generar crecimiento y revitalizar el empleo. La presidencia danesa ha puesto su mirada en el mercado único europeo para conseguirlo, desarrollando el potencial que aún está por explotar y las facilidades que da para introducirse en la era digital. La primera ministra danesa, Helle Thorning-Schmidt, ha dicho que “haremos más fácil y seguro el comercio online transfronterizo y trabajaremos para que las empresas europeas tengan una posición fuerte en los nuevos mercados globales.
En esta línea, el gobierno danés promoverá empresas innovadoras que garanticen un crecimiento sostenible y apoyará los esfuerzos en investigación e innovación. Trabajará además en la apertura de nuevas oportunidades comerciales para compañías europeas y ya hay previstos acuerdos con Japón, India, Canadá y Túnez.
Como parte del desarrollo del mercado único, la presidencia danesa afirma que hay que asegurar el respeto de los derechos de los trabajadores para garantizar que se cumplan las normas sobre remuneración y condiciones de trabajo.
Respuesta coordinada a la crisis
La respuesta a la crisis necesita un enfoque coordinado e interrelacionado para abordar conjuntamente las crisis financiera, de recursos y climática. Con este planteamiento, el gobierno danés se propone fomentar el uso de las tecnologías verdes y la innovación sostenible para impulsar la economía. Como ha dicho la Ministra responsable Ida Auken: “Si podemos conseguir más por menos, habremos encontrado la clave para la economía verde del futuro”.
La UE ha desarrollado ya un ambicioso programa energético y climático vanguardista y hay que mantener esa posición con nuevas iniciativas que corresponden a la presidencia danesa. En concreto, trabajará en el 7º Programa de Acción Ambiental, en las líneas generales de la política energética europea hasta 2050 y en conseguir una voz única europea en la Conferencia Río+20 de la ONU para la estructuración de una economía mundial sostenible.
Pero además Dinamarca cree que las consideraciones energéticas, climáticas y medioambientales deben integrarse en otras políticas de la UE, como la Política Agrícola Común, la Política Pesquera Común y la Política Común de Transportes. Por eso, apoyará su inclusión en la discusión del Marco Financiero de la UE para el periodo 2014-2020.
La presidencia danesa considera prioritaria la cooperación en Europa para garantizar la seguridad de los ciudadanos y resolver los problemas transfronterizos. En su programa, propone una lucha más eficaz contra la delincuencia internacional y el terrorismo y asegurar un buen funcionamiento del sistema común de asilo y la cooperación en el espacio Schengen. “Con el fin de gestionar mejor la migración procedente de terceros países, dada la importancia de los recientes acontecimientos en el sur del Mediterráneo y en el Sureste de Europa, la presidencia danesa continuará los esfuerzos para finalizar el Sistema Europeo Común de Asilo antes de finales de 2012”, dice en su avance de prioridades. Su idea es conseguir un control más seguro de las fronteras exteriores de la UE.
Además Dinamarca se propone trabajar junto a la Alta Representante para la Política Exterior común y el Servicio Europeo de Acción Exterior para reforzar el papel de la UE en la escena mundial, más ahora con el empuje de las nuevas potencias globales emergentes.
La primera ministra, Thorning-Schmidt, resume así su misión para los próximos seis meses: “Es importante que volvamos al núcleo original de la UE: la cooperación para encontrar soluciones comunes a los desafíos comunes. La presidencia danesa tiene que servir para demostrar que la cooperación en la UE puede marcar la diferencia para los ciudadanos.”





