La Eurocámara aprobó por amplia mayoría una resolución contra Cuba por la muerte del disidente Zapata, un plomero de 42 años, y alertó sobre el posible «fatal desenlace» que podría tener la huelga de hambre que sigue el opositor Guillermo Fariñas.
El texto, adoptado por 509 votos a favor, 30 en contra y 14 abstenciones, «deplora la ausencia de todo gesto significativo» de La Habana, como reacción al llamado de la comunidad internacional en favor de liberar a los presos políticos.
Los parlamentarios europeos instaron a los dirigentes europeos a reforzar «las medidas» para exigir la liberación de los presos políticos y «promover y garantizar el trabajo de los defensores de los derechos humanos» en la isla.
El Gobierno cubano salió al paso de inmediato para rechazar la resolución del Parlamento Europeo y dijo que Zapata era un «preso común», juzgado por varias causas, entre ellas estafa, desacato, violaciones, lesiones graves, tenencia ilegal de arma blanca y desórdenes públicos en 1988, 1993, 2000, 2002 y 2003.
«Después de una campaña concertada por poderosas empresas mediáticas fundamentalmente de Europa, que han atacado ferozmente a Cuba, el Parlamento Europeo acaba de aprobar, luego de un sucio debate, una resolución de condena (…) que manipula sentimientos, tergiversa hechos, esgrime mentiras y oculta realidades», señaló la declaración de La Habana.
Zapata estaba cumpliendo condenas por más de 25 años de cárcel.
La resolución de condena llega en momentos en que España posee la presidencia semestral de la Unión Europea (UE) y se propone impulsar los lazos entre el bloque y la isla comunista.





