El número de empresas y personas que se declararon en concurso de acreedores (suspensión de pagos) alcanzó en España en el segundo trimestre del año la mayor cifra de su historia, 2.272, es decir, el 28,6 % más que en el mismo periodo de 2011, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La estadística de procedimientos concursales publicada hoy por el INE indica que la cifra de empresas insolventes aumentó el 36,2 % entre abril y junio y alcanzó las 2.026, mientras que el número de personas físicas que se declararon en concurso se redujo 12 % y quedó en 246.
En el segundo trimestre del año continuó la tendencia de 2011, cuando se registró la cifra récord de 6.755 insolvencias, un 13,3 % más que el año anterior.
Por sector de actividad, el 30,8 % de las empresas concursadas en el segundo trimestre tienen como actividad principal la construcción, el 18,3 % la industria y el 17,4 % el comercio, en tanto que en función del tipo de concurso, 2.111 fueron voluntarios, un 27,1 más que en igual periodo de 2011, y 161 necesarios, con el 51,9 % más.
Los datos del INE indican que las pequeñas y medianas empresas sufren en mayor medida que las grandes corporaciones los efectos de la crisis, ya que el 70 % de las empresas concursadas se encuentran en los tramos más bajos de volumen de negocio, por debajo de dos millones de euros.
El 87,8 % de las empresas que tuvieron que solicitar concurso de acreedores no pertenecía a ningún grupo empresarial. De las que sí pertenecían a una gran firma, el 11,9 % eran españoles, y el 0,3 % restante, extranjeros.
Las comunidades autónomas con mayor número de concursos en el segundo trimestre del año son Cataluña (478), Valencia (365), Madrid (268) y Andalucía (263), en tanto que las regiones con menos insolvencias fueron La Rioja (16), Extremadura (21) y Cantabria
Impagos empresariales
Los niveles medios de impago soportados por las empresas españolas se elevaron un 39% en el segundo trimestre del año respecto al mismo periodo del año anterior, según el Índice Crédito y Caución de Incumplimiento.
La firma explicó que la caída de la actividad económica y las dificultades para acceder a los mercados de crédito, tanto para las empresas como para los hogares españoles, han derivado en un «deterioro generalizado» del comportamiento en pagos. Tras las mejoras registradas en 2010 y en el primer semestre de 2011, los impagos empresariales volvieron a subir en el segundo semestre de 2011 y llegaron al 55% interanual en el primer trimestre de 2012. Según Crédito y Caución, esta situación se prolongará probablemente a lo largo de lo que resta de año, habida cuenta del entorno económico caracterizado por la debilidad del crecimiento.
El repunte de los impagos se concentrarán sobre todo en sectores que, como la venta minorista y el comercio, están fuertemente vinculados al consumo interno. Así pues, Crédito y Caución estimó que la construcción y los sectores asociados seguirán representando el grueso de las insolvencias, esto es una empresa de cada cuatro.