Disponer de los recambios adecuados para nuestro vehículo siempre es un asunto muy importante. La falsificación en estos elementos de vital importancia en un coche es una realidad, y lo que en un principio puede parecer una buena idea tiene un mal resultado. No solamente a nivel de funcionamiento, también a efectos legales. Conoce cuáles son todas las implicaciones de montar recambios falsificados en tu vehículo y por qué no es nada recomendable hacerlo.
Falsificaciones en recambios de vehículos
Sí, en los recambios automóvil también son muy habituales las falsificaciones. Son muchos los usuarios que adquieren recambios para su vehículo y así pueden realizar ellos el mantenimiento. Lo que en un principio es algo que no tiene mayor relevancia, puede tener más implicaciones si se adquieren piezas falsificadas.
Las más habituales son aquellas en las que están implicados componentes eléctricos. Las bombillas o bujías son una de las más frecuentes. De la misma manera, el usuario que va buscando precio bajos se encuentra con recambios aparentemente de buena calidad, ya que están falsificados al detalle. Incluso los envoltorios han sido reproducidos con buen nivel, pero cuando se reciben estas piezas comprueban que hay algo que no cuadra. Es evidente, si un recambio tiene un precio que rondan los 30 €, es imposible encontrarlo de la misma marca por 20 € menos.
Este es el primer signo de alarma, por lo que siempre debemos confiar en comercios autorizados como DAPARTO para comprar recambios certificados. Adquirir un recambio en un sitio de confianza siempre es una garantía, nunca merece la pena tratar de ahorrar dinero con algo que puede tener consecuencias bastante negativas.
Casos reales de usar piezas falsificadas
Elegir recambios falsificados, ya sea de manera consciente o no, tiene como primer efecto negativo tirar el dinero. Estas piezas no pasan por los controles de calidad correspondientes y su ciclo de vida es mucho menor.
Por ejemplo, en el caso de las bujías, fundamental parael funcionamiento del motor, la chispa producida no tendrá la misma potencia, ni será capaz de mantenerse a pleno rendimiento durante el tiempo habitual. Como consecuencia, habrá que reponerlas en un plazo de tiempo mucho más corto. Lo mismo ocurre con algo tan simple como las escobillas limpiaparabrisas. En caso de necesidad, como una tormenta, probablemente no den el rendimiento esperado, lo que podría derivar, incluso en una salida de vía. ¿Merece la pena a subir este tipo de riesgo por tratar de ahorrar algo de dinero?
Repercusiones legales de la falsificación
Cuando la pieza falsificada está implicada en la seguridad del vehículo, como podría ser el caso de lo neumáticos o algún tipo de componente electrónico, estamos aumentando las posibilidades de sufrir un accidente. Para un usuario que haya realizado la sustitución de una pieza por una falsificada, no habría ningún tipo de consecuencia de tipo legal en ellos. Sin embargo, en el caso de los talleres que las montan, se estaría enfrentando a una sanción administrativa. En el caso de ocurrir algún tipo de siniestro y encontrarse que una de las piezas que ha fallado de falsificada, el asunto se podría complicar bastante, y puede que las aseguradoras planteasen problemas importantes a la hora de cubrir los daños a bienes o personas.
Evitar la tentación de comprar barato es el principal punto de partida para no tener que enfrentarnos a problemas. Comprar los recambios en lugares que ofrecen garantías y que no admiten bajo ningún concepto falsificaciones es el mejor escudo para protegerse de estas piezas. Desgraciadamente, en Internet es muy sencillo encontrar sitios web que ofrecen piezas que son falsificaciones. Estas tienen un precio mucho más bajo, pero obviamente no han pasado por las certificaciones ni por los controles de calidad exigidos en el continente europeo.
Lo que en un principio puede ser algo bastante atractivo, ahorrar dinero por las piezas de desgaste habituales, siempre produce un mal resultado, no solamente a la hora del funcionamiento, sino de la propia satisfacción del cliente. Las piezas falsificadas pueden incluso llegar a producir averías costosas. Pongamos el caso de los lubricantes, que están destinados a reducir la fricción de piezas móviles y evitar calentamientos. Un aceite que no haya pasado los pertinentes controles de calidad es una auténtica bomba de relojería para nuestro motor.
Por todo esto, siempre es importante conocer cuál es el origen de nuestros recambios para el coche. Cuando estos son originales sabemos que van a dar el rendimiento adecuado en todo momento, cumpliendo su función correctamente y evitando sorpresas inesperadas. Las falsificaciones de los recambios de vehículos están a la orden del día y muchas de ellas son difíciles de detectar. Por eso, adquiere siempre tu recambios para tu coche en tu tienda por Internet de confianza. Esquiva cualquier tipo de inconveniente que una falsificación te dará, siempre más pronto que tarde.