El Ministerio de Economía ultima un nueva regulación para los Colegios Profesionales. Es bastante factible que antes del verano se tramite el anteproyecto de ley de servicios profesionales, del que poco se conoce aunque ha trascendido que se pretende eliminar la obligatoriedad de colegiación para los profesionales. La idea sería que la colegiación sea siempre voluntaria, excepto en los casos de los servicios sanitarios y jurídicos. El Gobierno pretende además, con esta ley, reducir las profesiones que tienen reservas de actividad, es decir aquellas que sólo pueden desempeñarse por parte de quien tiene una determinada cualificación. En estos momento hay identificadas 192 profesiones con este tipo de restricciones, la nueva ley pretende reducirlas a unas 50. Mientras se conoce el texto definitivo, DIARIOJURIDICO ha querido conocer como está afrontando este nuevo entorno las propias profesiones a través de su principal institución Unión Profesional

“Pensamos que la Directiva de Servicios era necesaria, sobre todo en lo referente a la Ley Omnibus,” comenta Juan José Sendín, uno de sus vicepresidentes y presidente del Consejo General de Colegios de Médicos desde el 2009, “ salvo lo que tiene que ver con la eliminación de la colegiación obligatoria y sus matices que solo va a afectar a España y Chipre. Desde su punto de vista considera que los Colegios, Corporaciones de Derecho Público, según se señala en la Constitución Española se pueden adaptar bien al nuevo entorno.” El reparo real es a que nos quiten esa competencia de control de la colegiación obligatoria que es esencial para nuestro compromiso con la sociedad. Desgraciadamente no se ha producido un acercamiento entre Administración y profesiones para buscar un punto de encuentro en la futura ley de servicios profesionales”.

Unión Profesional es la asociación estatal que representa a las profesiones colegiadas españolas. Está integrada por 40 Colegios Profesionales y Consejos Generales y Superiores de Colegios Profesionales que, juntos, aglutinan a más de 1.000 colegios profesionales y cerca de millón y medio de profesionales liberales en todo el territorio estatal. Abarca sectores como el jurídico, sanitario, económico, social, científico y técnico. Por su estructura tiene un carácter interdisciplinar. UP es fruto del compromiso de las profesiones con el impulso y defensa de la cultura y los valores profesionales en la sociedad. UP es un eje de vertebración intelectual, económica y social de primer orden.

Fue creada en 1980 para la defensa de los intereses comunes de las profesiones y la consecución coordinada de las funciones de interés social. Desde su inicio ha sido interlocutor y foro de debate, opinión y discusión de todas las cuestiones relacionadas con los colegios profesionales y sus estructuras así como del ejercicio de las profesiones. En el ámbito internacional, Unión Profesional lleva a cabo una intensa actividad. Ostenta la vicepresidencia de la Unión Mundial de Profesiones Liberales (UMPL) –institución que tiene el estatus de órgano consultivo de la ONU- y del Consejo Europeo de Profesiones Liberales (CEPLIS).

UP está presidida por Carlos Carnicer Díez, que es, a su vez, Presidente del Consejo General de la Abogacía y consejero de Estado. Es la representante estatal de las profesiones colegiadas. Aspira a ser el referente del modelo colegial español, sustentado sobre la deontología y la excelencia profesional, y de los valores del profesionalismo ético. Actúa como vertebrador social, económico e intelectual. Tiene como misión el fruto del compromiso de las profesiones colegiadas españolas con el impulso y defensa del modelo colegial español y de la deontología profesional. Facilita a través de su acción la transición hacia la profesionalización efectiva de la dirección y gestión de las organizaciones colegiales -consejos generales, autonómicos y colegios profesionales- para el mejor desempeño de las funciones de interés general y público que tienen encomendadas por ley.

Precisamente el último número de Profesiones, revista institucional de Unión Profesional, incluye un especial que mira con decisión hacia Europa. Es por esto, por lo que sus páginas reúnen firmas destacadas tanto del mundo profesional, como del tecnológico o del de la comunicación. Un repaso, como dice su portada, a las diversas estaciones en las que los colegios profesionales deben apearse: la regulación, la formación, la deontología, la comunicación y la tecnología.

¿Podría resumirnos la jornada celebrada en Badajoz sobre Colegios Profesionales, con la presencia del presidente autonómico extremeño Vara?

Estuve en esa jornada para inaugurarla, en ese acto el doctor Fernández Vara hablo de la necesidad que se produjera un entendimiento, que de momento no se ha producido, en un tema tan importante como es de las profesiones, entre la Administración y los propios Colegios. Un tema tan importante como el de la colegiación siempre obliga a que exista una puesta en común entre las profesiones y las diferentes administraciones y esto la verdad es que no se ha producido.
También este contacto no deja de ser dificultoso porque tanto las profesiones como sus organizaciones son complejas y diferenciadas. De momento ese contacto que mencionó Vara en su intervención desde Unión Profesional no tenemos constancia que se haya producido

¿Cuáles son las causas de esa falta de diálogo entre la Administración y las diferentes profesiones?

Probablemente en este momento la Administración con la justificación de la crisis económica y desde la posición de poder que tiene no lo ha considerado necesario por su parte. Este ejercicio de poder dice poco de querer avanzar juntos ambas partes. No lo entiendo de otra manera. En una sociedad democrática como la que vivimos y con el papel que se espera de las estructuras colegiales debería haberse producido el diálogo entre ambas partes. Hasta ahora hemos trabajado con hipótesis de globos sondas; de propuestas sobre sospechas.. que si adelanto un borrador o no lo adelanto… pero estamos a la vuelta de la esquina de su aprobación y no conocemos ninguna propuesta formal

De lo que conocemos se hace un ejercicio muy simple. Prácticamente desaparece como colegiación obligatoria en todos los colegios, salvo en el caso de los abogados y profesiones sanitarias. Y de las profesiones sanitarias nos quedan como nos quedan-No se ha producido, por tanto, ese encuentro para pactar las fórmulas más adecuadas

Y esos datos filtrados que señalan la abolición de la colegiación obligatoria en la mayoría de las profesiones, ¿cómo se valora desde Unión Profesional?

Es evidente que todas las profesiones no son iguales. Pero ese dumping que se ha producido de los Colegios Profesionales no es responsabilidad de los que si son profesiones que precisen la colegiación. No son todas iguales pero realmente lo que no se puede hacer es descapitalizar y minimizar todas simplemente para dar salida aun error histórico que posiblemente había excesivos colegios

Creo que este tema se tendría que haber negociado de forma individualizada, uno por un colegio. Por este motivo, esta medida la vemos como un atentado a una manera de estar estructurada la sociedad prevista en la Constitución. Vamos a ver en que queda todo esto. Aquellos colegios que nos quedemos con la colegiación obligatoria aún no sabemos cómo quedará este tema.

¿Que se suprima la colegiación obligatoria puede hacer que los colegios afectados desarrollen otras actividades en busca de ingresos?

Concretamente yo puedo hablar desde la perspectiva de los colegios de médicos. El problema para nosotros no es el económico. Entiendo que lo más importante es que no podríamos controlar el ejercicio de la profesión médica y asi el propio Código Deontológico no lo podríamos aplicar si no tuviéramos la obligación que todos estuvieran adscritos, porque todo aquel de esta forma cualquiera que no quiera cumplir con las normas éticas se descolegia.

Respondiendo a su pregunta no lo vemos factible. Seríamos una cosa distinta a lo que somos. Seríamos una asociación con unas competencias especiales pero dejaríamos de ser la corporación de derecho público que la Constitución espera de nosotros. Si se aprueba la no colegiación obligatoria dejaremos de ejercer las funciones claras y básicas que son de registro; control deontológico de la profesión, sobre todos los colegiados

La Constitución si no entiendo mal prevé que las Corporaciones sean de Derecho publico y no obliga explícitamente que las colegiaciones sean obligatorias. Pero como la propia Carta Magna los separa de las asociaciones, se supone que habla de sus características antes de que se promulgarla la misma Constitución.

Desde nuestro punto de vista si la colegiación no es obligatoria seriamos una asociación diferente a las que hay que se regirían por estatutos también diferentes a los que existen

¿Va a ser sencillo para los Colegios adaptarse al nuevo marco, sabiendo que muchos de ellos están adaptando sus estatutos a la Directiva comunitaria de servicios?

Lo que marca la Directiva de Servicios nosotros le dimos la bienvenida. Creemos que su desarrollo nos permitía mejorar mucho nuestras condiciones como instituciones, de hecho algunas cuestiones las estábamos reclamando con anterioridad
Pensamos que la Directiva de Servicios era necesaria, sobre todo en lo referente a la Ley Omnibus, salvo en esto último que nos venido a ver relacionado con la colegiación obligatoria y sus matices que solo va a afectar a España y Chipre

Creo que nos podremos adaptar bien al nuevo entorno. El reparo real es a que nos quiten esa competencia que es esencial para nuestro compromiso con la sociedad. Es el caso de los colegios sanitarios que se adaptarían bien al nuevo entorno pero quedarían bastante disminuidas sus capacidades

Luego además hay otra cuestión importante, si no tenemos garantizada la financiación por los colegiados, el concepto de independencia y autonomía a la que obligan los Colegios la Directiva Europea quedarían también claramente en entredicho. No puedes ser autónomo e independiente si para tu financiación tienes que depender de agentes externos a la propia corporación.

Otra actividad impulsada desde la directiva de servicios tiene que ver con el concepto de ventanilla única o e-administración…
Creo que todas las organizaciones que dependen de Unión Profesional tienen respuesta adecuada a esta situación. Cada uno le hemos dado la solución más adecuada según nuestra profesión.

Se está haciendo bien, seguro que hay diferentes respuestas en función de cómo cada organización prevé de cómo le va a quedar los cambios que se van a operar sobre ella

Nosotros pensamos que el papel de los Colegios en la ventanilla va a ser positivo y va a reforzar nuestro su papel en la ventanilla única electrónica y estamos preparados para abordarla.

¿Dónde cree que estarán los Colegios Profesionales dentro de cinco años?

Algunos Colegios Profesionales estarán mejor de lo que estamos ahora independientemente de lo que al Gobierno se le ocurra. Esta estructuras no son tan endebles como parecen como para poder permitir que la regulación que tenemos, pase asi por las buenas, a mano de las administraciones, que parece es de alguna forma lo que se pretende.
Espero que algunos colegios queden mejor posicionados socialmente y otros, porque no fue nunca necesaria su adscripción obligatoria a los mismos, pasarán a ser asociaciones de adscripción voluntaria

Para los colegios clásicos y en los que se prevé que se mantenga la colegiación creo que van a quedar reforzados
De alguna forma va a quedar clarificado el horizonte porque durante muchos años hemos tenido la duda sobre nuestras cabezas; siempre se ha estado cuestionando la colegiación viéndose únicamente sus posibles lados negativos de la misma. Creo que nunca se ha valorado convenientemente el papel ciertas corporaciones en algunas profesiones.

¿Tienen desde Unión Profesional la sensación de que los Colegios siempre han sido elementos incómodos para la Administración?

Por la propia experiencia de las profesiones clásicas desde hace veinticuatro siglos, en la época de Hipócrates no se entendía bien sus afirmaciones con lo que decían los políticos de entonces. Es como si hubiera una confrontación permanente entre el poder político y los sanitarios. Pero creo que es bueno que exista esa discrepancia; de esta forma el individuo se ve atendido desde dos perspectivas diferentes.; la del político y la del sanitario

Creo que la Administración si nos tiene miedo. Con mucha frecuencia los Colegios desligitimamos las ideologías que ellos portan. A veces se hacen planteamientos legislativos ideológicos que no nos gustan a los colegios. Es el caso de cuando hablamos del aborto; los médicos matizamos; igual pasa de los dilemas éticos o del final de la vida. También sucede igual cuando hablamos de listas de espera o de la atención en un juicio. En estos casos y otros los profesionales matizamos ajustándonos a criterios profesionales y no políticos.

El político siempre tiene criterio de oportunidad; de relación coste efecto que se traduce luego en votos. Nosotros tenemos otro enfoque, de ahí que nos opongamos en muchas ocasiones a las propuestas que se plantean desde el poder político. De alguna forma algunas leyes creo que son una provocación y contravienen los principios de muchas profesiones.

Este debate que no es malo. Al final políticos y profesionales lo que intentan es ofrecer mejores respuestas a la población sobre determinados temas. Sería realmente malo que todo quedara en manos del poder político. Normalmente las experiencias son negativas cuando el propio poder político se ocupa de cosas que no sabe.
Dentro de este contexto parece evidente resaltar que los que más saben de las profesiones son las propias profesiones. Y los que mejor pueden regularlas son las propias profesiones, no el poder político

¿Cuál seria el efecto más directo si al final las profesiones acaban siendo controladas desde la Administración?

Sería difícil soportar esta situación que usted describe. España no puede salir del mapa del mundo desarrollado. No conozco ningún país desarrollado que las profesiones estén controladas por la propia profesión. Sería una dictadura encubierta y una desvertebración de los espacios intermedios de la sociedad

Nuestro Estado perdería el calificativo de social sin lugar a dudas. Sería la forma de desmontar un tejido profesional imprescindible para ofrecer calidad. Es el caso de la justicia, por ejemplo, que con tanto intervencionismo político está como esta. Su prestigio social esta bajo mínimos por esta intervención del poder político

Sería muy malo si todas las labores que realizan las corporaciones profesionales pasaran pura y llanamente al espacio político. En nuestro caso creo que tendríamos que hablar de diecisiete espacios políticos posiblemente diferentes entre sí.
Al final esta situación sería catastrófica, una especie de tsunami, desde luego. Pero estoy convencido que la sociedad no lo iba a perdonar. Aunque es cierto que mucha gente se queja del insuficiente papel de las corporaciones, habría que ver el escenario que se montaría con las injerencias del poder político en estos temas. Esperemos que nunca lleguemos a ello para hacer esta comprobación.

Dejar una respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.