Recientemente se ha reunido la Mesa de Diálogo Social para tratar el Estatuto del Becario. El Ministerio de Trabajo y Economía Social los sindicatos CCOO y UGT y las organizaciones empresariales CEOE y CEPYME van a abordar este estatuto que vele y garantice los derechos de los becarios.
En este sentido, los becarios no cuentan con una legislación propia, aunque sí existen decretos sobre las prácticas laborales y curriculares. Sin embargo, muchas empresas no cumplen con estas normativas. “Tener contratados según legislación a cualquier trabajador esta dentro de las obligaciones de la empresa. Está claro que se puede meter dentro de las acciones a revisar en un programa de compliance ya que los delitos contra la seguridad social son uno de los que recoge la reforma del código penal, donde las empresas pueden cometer un fraude”, señala Raquel Navares, directora de PONS Compliance.
Es aquí donde el compliance puede jugar un papel clave contra algunas prácticas abusivas que se pudieran dar por parte de las empresas contras estos trabajadores. “Establecer las condiciones laborales específicas en un plan de compliance protege tanto a la empresa como al trabajador frente a estos abusos que se dan desgraciadamente en muchas ocasiones”, explica Raquel Navares.
España, candidato a liderar esta regulación
Cuando este estatuto esté finalizado y puesto en marcha, España puede convertirse en un referente internacional en la regulación de los becarios. En la UE sólo Francia cuenta con una regulación al respecto. Por lo que nuestro país tiene la oportunidad de liderar la legislación de estos trabajadores.
El objetivo de este estatuto es la formación práctica tutorizada en empresas u organismos equiparados, así como la actividad formativa desarrollada en el marco de las practicas curriculares o extracurriculares previstas en los estudios oficiales. Así como acabar con las prácticas laborales fraudulentas que se dan en muchas ocasiones con los becarios.
Fuente: Pons Compliance