La Audiencia Provincial de Álava ha condenado a Caja Laboral a devolver a un matrimonio las cantidades que abonaron por la suscripción de contratos de adquisición de aportaciones financieras subordinadas de Eroski y Fagor. El tribunal ha anulado estos contratos porque considera que hay «error en el consentimiento prestado al contratar».
La Audiencia también ha rechazado el argumento de Caja Laboral, que alegaba su falta de legitimación pasiva ya que no era parte del contrato de adqusición de subordinadas, sino una intermediaria.
El tribunal estima así el recurso que presentó la pareja a la sentencia del Juzgado de Primera Instancia nº5 de Vitoria, que rechazó su demanda.
El importe de los contratos que deberá devolver Caja Laboral asciende a 200.862’85 euros más los intereses.