Los procesos judiciales en relación con Vivanta se acumulan en los juzgados, y ya se han traducido en varias dimisiones de ejecutivos de BNP Paribas, según adelantaba MERCA2.es. La presión sobre Portobello continúa creciendo, en cuanto a que los socios minoritarios se han enterado, encima, de malas maneras sobre la cláusula de contrato por la que BNP y ARES podrían vender la compañía.
Ramón Pérez Linares en AZ Periodistas informa que «entramos en el tercer capítulo de un asunto que cada día se complica más. Si en el primer artículo nos referíamos a la reputación de BNP Paribas y Ares Management por el caso Vivanta, y en el segundo hacíamos hincapié al problema en que el caso Vivanta entra en BNP Paribas en el peor momento por la OPA sobre Naturgy». Este medio indica que «tras el escándalo Dentix, otra firma de franquicias empieza a inundar los archivos de los juzgados madrileños. Tiene todas las papeletas para convertirse en un nuevo proyecto empresarial fallido, al haber dejado ya a pequeños propietarios, literalmente, en la “ruina”.
En cuanto al auto al que ha accedido MONCLOA.com, el documento insiste en que la socia y sus empleados “no recibieron la formación inicial y durante dos años tampoco han recibido curso alguno”, incumpliendo así el contrato de franquiciado. Por ello, acusan a Portobello y directivos de Vivanta de ofrecer “nula formación y falta de asistencia continuada”. También inciden en la irresponsable “falta de conocimiento del mercado y el sector de actividad” de Portobello a la hora de embarcarse en el proyecto. En concreto, la marca denunciante, ARCE Odontología, reivindica que pasaron de ganar casi 35.000 euros mensuales a una media de 17.000 euros en 2018 después del nuevo branding como Vivanta. Por ello, achacan una “inviabilidad del business-plan”, además a una falsa promesa de gran cobertura publicitaria que se ha quedado en “aguas de borraja”.
Recordemos que según Europa Press varios juzgados penales y mercantiles de Madrid están investigando al fondo de inversión Portobello, a raíz de una serie de querellas y demandas presentadas por socios minoritarios de la cadena de clínicas dentales y estéticas Vivanta –una de sus empresas– por las presuntas irregularidades en la misma, incluido un supuesto caso de espionaje. Portobello, cuyos socios son Iñigo Sánchez-Asiaín Mardones, Juan Luis Ramírez Beláustegui, Ramón Cerdeiras Checa y Carlos Dolz de Espejo, y que tiene a BNP Paribas (2,5%) y European Investment Fund (13,33%) entre sus inversores, se enfrenta igualmente a varias causas mercantiles.
Este mismo medio de Diario Jurídico ya informó que en el juzgado de instrucción nº 49 ha declarado el pasado jueves 21 de enero en calidad de investigados Portobello Capital por una querella criminal por Estafa, Administración Desleal y Falsedad interpuesta por el empresario Ignacio Martinez, expropietario de una red de franquicias Unidental.
Han declarado:
– Ramón Cerdeiras Checas como representante legal de Portobello Capital.
– Carlos Dolz de Espejo, socio de Portobello Capital.- Jorge Morales como representante legal de Clínicas Vivanta.
– Juan Olave como ex consejero delegado de Vivanta.
– Jordi Gonzalez Burgada, como ex director financiero de Vivanta. Así mismo este último está imputado por la audiencia nacional en la supuesta estafa dental de Vitaldent.
El dueño de clínicas Unidental adquiridas por Portobello en el 2017 para crear VIVANTA, ha sido víctima de una supuesta trama para comprarle su negocio mediante engaños a bajo precio. Un plan defraudatorio y engañoso, donde le ocultaron todo tipo de información sobre las clínicas e incluso maquillaron los balances.
Portobello es un fondo de inversión supervisado por la CNMV, e inscrito con el nº213 y sus socios son: Iñigo Sánchez-Asiaín Mardones, Juan Luis Ramírez Beláustegui, Ramón Cerdeiras Checa y Carlos Dolz de Espejo. Los socios de Portobello están viviendo un calvario judicial con muchos procedimientos abiertos penales, y mercantiles interpuestos por los socios minoritarios. Las investigaciones de la Justicia a Portobello abren una crisis reputacional no sólo a este fondo, fundado por Iñigo Sánchez Asíain, sobrino del presidente del BBVA; sino también al banco francés BNP Paribas ya que el pasado en diciembre de 2020 entró a formar parte del accionariado de las clínicas Vivanta.