Un tribunal de Estados Unidos concluyó que la Bratz no es una copia de la famosa muñeca estadounidense.

El juez dejó revocó una sentencia de diciembre de 2008, que obligaba a MGA Entertainment entregar a Mattel los derechos de la mayoría de los productos de la marca Bratz.

En esa ocasión, el jurado encontró que el diseñador que creó la muñeca estaba trabajando en Mattel, pero después vendió la idea a MGA, que empezó a comercializarla en 2001 con el slogan «Bratz, chicas con pasión por la moda».

«Aunque se asume que MGA tomó ideas de manera ilícita, la empresa le añadió valor al convertir ideas en productos y, eventualmente, en una marca popular y de gran rentabilidad», señaló el juez. «Hubo esfuerzos legítimos de MGA para desarrollar el producto».

La decisión ha generado controversia en el sector de la propiedad intelectual.

Carole Handler, abogada especializada en el tema pero ajena al proceso, dijo que se hace difícil para las empresas reclamar que son propietarias de las ideas de sus empleados.

«Es una sentencia de enorme importancia y que tendrá repercusión en estos casos que no son tan frecuente», dijo Handles.

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