El proyecto buscar mayor flexibilidad para los parlamentarios que desean cambiar de partido, al tiempo que endurece las condiciones para obtener personería jurídica y regula las coaliciones.
Esta reforma le daría vida a los movimientos políticos para que participen en procesos electorales a partir de un sistema de afiliación. Las modificaciones propuestas tendrían impacto en 2026.
El proyecto de ley sobre transfuguismo, que superó su tercer debate, busca establecer medidas para regular la conducta de los políticos que cambian de partido o movimiento político después de ser elegidos. Este fenómeno, conocido como transfuguismo, ha sido objeto de debate debido a su impacto en la estabilidad política, la confianza ciudadana y la transparencia en la gestión pública.
En la modificación al artículo 108 de la Constitución propuesto en la reforma, se establece que para poder tener personería jurídica y participar en elecciones, los movimientos políticos deben tener al menos afiliados que sumen el 0.2% del censo nacional electoral.
“Hoy existen partidos en el Congreso que se coaligaron para obtener las curules, esos partidos no terminan salvando su credencial, no hacen el esfuerzo del fortalecimiento real del partido. Se pueden hacer las coaliciones pero que no permita más que terminen siendo una figura para tener curules sino para fortalecimiento de unos grupos con identidad ideológica”, indicó el senador Alejandro Chacón, Partido Liberal
Por su parte, el senador Carlos Motoa, partido Cambio Radical, manifestó que “no es la primera vez que los partidos de gobierno presentan una iniciativa con el objetivo de permitir el transfuguismo para el Congreso actual y para los integrantes de corporaciones públicas territoriales. Considero que esta posibilidad de movilidad política o de transfuguismo, erosiona a los partidos políticos actuales”.
Agregó que “esta iniciativa va directamente a afectar a partidos que hoy hemos representado la oposición en el Congreso. Veo absoluta incoherencia que llevemos dos décadas con reformas constitucionales, legales, para fortalecer los partidos políticos, régimen de bancadas, y hoy pretendamos con una sola iniciativa, vulnerar lo que se ha venido trabajando durante tantos años”-
En el debate también participó la senadora Clara López, partido Pacto Histórico, expresando, “quienes se coaliguen y logren el umbral, deban transformar esa coalición en un nuevo partido político y eso desde luego, abona el fortalecimiento de los partidos y tendrán que reformar sus estatutos, estructurarse de manera democrática. Me parece que complementa de una manera muy importante esta reforma política de carácter integral”.
A esta discusión también se sumó el senador Fabio Amín, Partido Liberal, indicando que “estoy de acuerdo con hablar de transfuguismo, pero me aparto de la habilitación que pretende la norma, toda vez que cada 4 años se pueda permitir que la persona tome la decisión de cambiar de partido”. “No es simplemente una persona quien por el derecho se puede hacer a la credencial o a la curul, es al final la suma de todos, de un colectivo, de una alianza de un partido. Para mí la curul es de la persona pero también es del partido”, agregó.
Otra de las modificaciones clave es la regulación de la inscripción de candidaturas. Según el proyecto, los movimientos sociales y grupos significativos de ciudadanos solo podrán inscribir candidatos de manera directa hasta un año antes de las elecciones.
Pero, ¿cuál es la esencia de la iniciativa? Principalmente, permitir que los políticos puedan cambiar de partido solo una vez durante su mandato, sin enfrentar consecuencias severas, pero bajo ciertas condiciones. Entre los objetivos principales del proyecto se destacan los siguientes:
Impedir el cambio de partido sin consecuencias: Los políticos que sean elegidos por un partido o coalición no podrán cambiar de afiliación política durante su mandato sin enfrentar sanciones.