Las ventas descendieron un 2,8% lo que supone dos décimas más que en septiembre.
En lo que se refiere a los comercios unilocalizados la bajada fue del 5% y entre las pequeñas cadenas el empeoramiento de las ventas fue del 4,6%.
La nueva caída además se traduce en nuevos descensos del empleo cuya tasa nuevamente ha sido un 0,9% inferior a la de septiembre.
Para la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos-ATA estos datos demuestran lo que ya venía diciendo la organización: que el consumo no logra remontar y que la caída de ventas del comercio minorista sigue si tocar fondo.
Para el presidente de ATA, Lorenzo Amor, “es urgente que el Gobierno aborde el plan de choque para el comercio minorista que prometió en el 2009. Lo ha habido en otros sectores como el carbón o el automóvil y es ilógico que una actividad netamente vertebradora de miles de municipios siga sin tener un plan estratégico que logre frenar la sangría de negocios y de empleos. El comercio minorista lleva dos años de descensos en el número de negocios y de asalariados. Difícilmentemente se puede mejorar la competitividad de la economía si no se salva un sector que representa a más uno de cada cuatro empresarios de este país”.
