La posibilidad de acceder a los registros médicos o a la atención sanitaria a través de dispositivos como el teléfono móvil, smartphones o el ordenador reporta beneficios tanto para el paciente como para el sistema sanitario, ya que implica una notable reducción tanto en costes como en tiempo.

En este sentido, aproximadamente seis de cada diez pacientes (57%) afirman querer disponer de acceso a su registro sanitario, con el objetivo de consultar en cualquier momento el historial médico o los tratamientos que está recibiendo.

Esta es una de las principales conclusiones del estudio “The Mobile Personal Health Record”, elaborado por Deloitte en Estados Unidos.

Los registros personales de salud móviles, todavía en implantación, permiten al paciente, entre otros aspectos, acceder a consejos para llevar una vida más saludable o controlar las facturas médicas a través del teléfono móvil o cualquier otro tipo de tecnología portátil.

Para su utilización, el único requisito es disponer de un dispositivo que permita recoger la información del paciente y enviarla, a través de Internet, a los registros personales de salud conectados de forma directa con la consulta del médico.

Las generaciones más jóvenes son las que se muestran más dispuestas a utilizar estas tecnologías.

Un 50% de los pacientes consultados cree que el acceso online al registro médico permite conocer mejor las condiciones personales de salud, mientras que un 40% considera que genera una comunicación más fluida entre médico y paciente.

Aunque los registros personales de salud todavía están desarrollándose en Estados Unidos, algunos proyectos piloto ya han demostrado su potencial para mejorar el sistema sanitario al evitar que se abuse de la toma de medicamentos o que las salas de espera en los hospitales estén saturadas.

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