Una mujer tendría que trabajar 418 días para ganar el mismo dinero que un hombre cobra por 365 días de trabajo.
Las mujeres sólo obtendrían igual sueldo que los hombres si trabajaran hasta el 22 de febrero, día precisamente elegido por el Parlamento europeo para conmemorar el Día Europeo de la Igualdad Salarial.
En la Unión Europea, el salario de las mujeres es inferior en un 15% al de los hombres, diferencia que se agrava en España, donde las mujeres cobran de media un 26,3% menos que los varones. Con datos de 2006, el salario medio anual femenino ascendió a 16.245,17 euros, el equivalente al 73,7% del sueldo masculino (22.051,08 euros).
En casi todas las comunidades autónomas, el salario medio de las mujeres es entre un 20% y un 30% inferior al sueldo medio de los hombres. Las mayores diferencias las registran Asturias y Aragón, y las menores, Canarias y Extremadura.
UGT explica que la mayor diferencia salarial entre mujeres y hombres en relación a la actividad económica se da entre los trabajadores de actividades sociales y servicios prestados a la comunidad, sector fuertemente feminizado. En este sector las mujeres perciben solamente un 63,03% del salario de los hombres.
En los sectores inmobiliario y de alquiler se producen diferencias similares. Concretamente, las mujeres perciben un 64,81% del salario masculino, y en el sector sanitario, altamente feminizado, la diferencia llega al 65,09%.
Por el contrario, el sector de educación, con una presencia de mujeres elevada, presenta la diferencia más baja de salarios por actividad, pues las mujeres pueden percibir hasta el 92,14% del salario de los hombres. También hay diferencias menos pronunciadas en dos sectores con elevada presencia masculina, como son la construcción (86,62%) y el transporte, almacenamiento y comunicaciones (83,94%).