D. Landelino Lavilla ha estado muy unido a Pelayo desde que en 2005 fuera nombrado Presidente del primer Patronato de la Fundación Pelayo y, posteriormente, pasara a ser el Presidente del Premio Pelayo para Juristas de Reconocido Prestigio, destacando siempre por su excelencia profesional y su gran calidad humana.
D. Landelino realizó, desde las distintas responsabilidades que ha ejercido, una gran aportación al Estado, así como una generosa contribución a la consolidación de nuestra democracia y nuestra convivencia en el actual Estado de Derecho.
El Consejo de Administración de Pelayo, los miembros del Jurado del Premio Pelayo y los patronos de la Fundación Pelayo quieren trasladar su admiración y respeto por D. Landelino, así como su más sentido pésame por la triste pérdida.
Descanse en Paz.
Fuente: Pelayo