1 – GM deberá ser rentable con un mercado estadounidense de 10 millones de unidades vendidas cada año, mientras que hasta el momento su punto de equilibrio era de más de 16 millones de vehículos.
2 – El sindicato de los trabajadores del sector automotor UAW a hecho «concesiones importantes» en materia de salarios y de cobertura médica para sus retirados.
3 – Los acreedores con obligaciones han aceptado canjear sus 27.100 millones de dólares de la deuda por un 10% de la nueva sociedad. GM cerrará 11 de sus fábricas y pondrá a otras tres en paro técnico.
4 – El Tesoro aportará 30.100 millones de dólares para ayudar a GM durante su reestructuración. A cambio, el Tesoro recibirá el 60% del capital accionario de la nueva sociedad.
5 – El Estado canadiense y la provincia de Ontario (donde GM posee varias fábricas) desembolsarán 9.500 millones de dólares y recibirán el 12% del paquete accionario.
6 – La «Nueva GM» pondrá en marcha un fondo encargado de financiar la cobertura de salud de los retirados del grupo. Este fondo contará con el 17,5% del capital accionario y recibirá bonos que le permitirán adquirir un 2,5% suplementario. Tendrá «mucha menos deuda y un balance de clase mundial» que le permitirá reinvertir en sus actividades.
7 – La «Nueva GM» ensamblará un nuevo y pequeño automóvil en una fábrica desafectada para llevar de un 66% a más de un 70% la parte de sus automóviles vendidos en Estados Unidos que son fabricados en este país.
8 – El gobierno «no desea contar con participación en el capital de las sociedades más tiempo del que sea necesario y buscará ceder sus intereses lo más pronto que le sea posible».
9 – El gobierno no intervendrá en la gestión del día a día de estas empresas.
10 – GM continuará honrando las garantías ofrecidas sobre sus modelos de autos. Durante su reestructuración bajo protección de la ley de quiebras, GM continuará funcionando de manera normal.